¡Hola! Volvimos con más dramatismo.
Queremos advertirles algo (aunque sabemos que igual lo leerán), este capítulo es un poco fuerte (demasiado) incluyendo que es muy explícito, y si alguna persona no aguanta es mejor que deje de leerlo o si no tendrá malos recuerdos o algo parecido. No nos responsabilizamos por malos pensamientos pues le advertimos. Suponemos que este capítulo será el más dramático de la serie así que no lloren, de aquí en adelante la historia se pone fea. Disfruten. El final se acerca.
No menores de 18 años.
*Luego de 5 meses*
-¡Ryeowook! ¡Ven a comer!- exclamó Kangin llamándome a la mesa.
Solté el par de navajas con las que estaba lastimando mi piel y las escondí debajo de la cama. Me hice una bolita en la cama (:3) pretendiendo estar dormido.
-Ryeo- y abrió la puerta-. Está dormido, le dejaré la comida aquí.
Esperé a que se fuera y fui por un poco de alcohol para mis heridas que sangraban en demasía. Sentía tanta calma cuando me hacía daño, era momentánea pero me hacía sentir bien, obviamente no me hacía olvidar a Jae pero al menos pensaba en otras cosas.
Miré la comida con desprecio e ira pues la consideraba culpable de mi sobrepeso y el odio que tenía Hyuk sobre mí y mi cuerpo.
-Estúpida comida- murmuré botando la comida en una bolsa dónde solía botarla.
Era hora de mis mensajes matutinos con Jae para ver si me perdonaba y aunque fracasaba la mayoría de las veces no dejaría de luchar por él.
*Están hablando por KakaoTalk*
Ryeo :D/ Jae por favor, ya no estoy gordo…¿Me podrías volver a amar?
Jewel is my life/ Ya te dije que dejaras de enviarme mensajes, no volveré a estar contigo.
Ryeo :D/ Hyuk… no importa las veces que me ignoras, siempre te seguiré amando y estaré dispuesto a ti si necesitas un cuerpo para saciar tus ganas.
Jewel is my life/ No quiero eso de ti, quiero que me dejes en paz, me voy.
Ryeo :D/ Hyuk, por favor, me duelen los brazos, te necesito, sálvame. Solo necesito un beso.
Jewel is my life/ No te quiero ver más Ryeo, entiéndelo.
Ryeo :D/ ¿Me vas a dejar solo y sin amor? Soy tu amor verdadero, tú mismo lo dijiste. La única persona que hace vibrar tu cuerpo cuando se acerca a ti.
Jewel is my life/ Dije muchas cosas en ese entonces Ryeo, cosas que lamento haber dicho.
Ryeo :D/ Jae, no me digas esas cosas por favor. Me haces sentir muy mal.
Jewel/ Ryeo, entiende que no quiero saber nada más de ti. Quiero salir de tu vida.
Ryeo :D/ ¿Te acuerdas cuando fuimos al parque y me dijiste que mi cara es muy graciosa y que es imposible que dejaras de grabar mi hermosa rostro? ¿Te acuerdas cuándo te pegué porque te besaste con Donghae? ¿Te acuerdas cuando pasamos nuestro aniversario en mi cuarto y me regalaste tu collar? ¿Te acuerdas cuando fuiste mío por primera vez? ¿Te acuerdas cuando lo hicimos en el hotel de Grecia y tuvimos muchas peleas? ¿Te acuerdas cuando declaramos nuestro amor, yo te dije “te amo” y tú me respondiste que seré tu chibi por siempre? Dime… ¿Lo sigo siendo?
Jewel is my life/ Ya déjalo Ryeo, enserio, no quiero acordarme de esas cosas.
Ryeo :D/¿Lo sigo siendo? Contéstame por favor.
Jewel is my life/ No, no lo eres, ya no te amo.
Ryeo :D/ Pero si tú lo dijiste, es más, siempre lo decías.
Jewel is my life/ Dije muchas cosas en ese entonces, cosas que me arrepiento de haber dicho.
Ryeo :D/ ¡Jae! Estoy llorando mucho, voy a tu cuarto en este momento para hablar mejor, todo estará bien, seguiré siendo tu chibi y nos amaremos por siempre.
Si, así de desesperado estaba, no pensaba en nada. Me levanté de la cama y fui a maquillarme, me puse mi mejor ropa y perfume. Cogí unos chocolates que siempre dejaba en la puerta de Jae y me dirigí a su cuarto.
Toqué inconscientemente y puse mi mejor posición.
-Jae, ya estoy aquí, ahora si hablemos- canturreé.
-Lárgate Ryeo, no te abriré y no quiero que te amanezcas al borde de mi puerta otra vez.
-Lo haré si no me abres, tengo tus chocolates favoritos.
Y después de varios minutos Jae nunca me abrió, me senté al borde y me dispuse a dormir.
No hay mucho que decir, era realmente patético, me cortaba, no comía y tomaba pastillas que me hacían sentir drogado.
Escuché a alguien abriendo la puerta, me caí pues estaba arrinconado en ésta.
-Jae, amor, me abriste- dije cogiendo sus manos mientras me arrodillaba y las besaba.
-¡Ryeowook! Te dije que no te quedaras ahí- dijo soltándose de mis dedos.
No hice caso alguno porque le extendí la caja de chocolates, no me la aceptó, solo quedó mirándome raro.
-¿No te gustan? Está bien, las botaré y te compraré más para que así me puedas amar.
-Estás loco, deja de andarte arrastrando por un poco de amor.
-Jae- dije ignorando lo que dijo enante-. Me maquillé y me puse perfume, ahora soy esbelto ya no estoy gordo y si quieres haré pesas para quedar como Hae.
Puso en blanco los ojos mientras cogía la caja de chocolates y me la tiraba en la cara.
-No quiero nada de ti- y me cerró la puerta en la cara.
Pegué un grito y comencé a pegar la puerta fuertemente.
-¡Jae! Ábreme ¡Por favor! ¡Jae!- seguía golpeando como un retrasado- ¡Jae! Por favor ¡Te amo!
Y después de gritar y gritar no logré respuesta alguna, pasaron casi tres horas de mi intento otra vez fallido, llorando fui a mi cuarto dejando los chocolates en su puerta.
Me encerré en el baño, estaba bien gritarle así pues los otros chicos estaban en otro piso, así nadie sabía de mis “hábitos alimenticios” ni las crecientes marcas en mis brazos y piernas.
Comencé a quitarme el maquillaje bruscamente mientras me veía con asco y desprecio.
Das pena Ryeowook, te odia, eres la razón por la que no te quiere, mírate eres feo y gordo, necesitas enflaquecer más y mientras tanto córtate para que consigas más fuerza para seguir luchando. El maquillaje no te hará bello, te hará ver ridículo
Decía la voz imaginaria cada vez que me veía en el espejo. Asentí y boté el algodón en el tacho de la basura. Comencé a tirar todo lo que tenía en el lavamanos de mi baño, a dañar todo a hacer un tiradero, lloraba desconsoladamente gritando el nombre de mi amado.
Cuando al fin me cansé me tiré en el suelo y cogí la hoja de Gillette que reposaba en el suelo junto al pañuelo lleno de sangre que utilizaba para secarme las heridas.
Cogí la hoja de Gillette y me la empecé a pasar por mi brazo izquierdo con fuerza provocándome un dolor incontrolable, la sangre corría por mi brazo. Solté la hoja filuda y me tiré en el suelo agitado, con la garganta seca y el brazo ensangrentando.
Viste que se siente bien, tienes que hacerlo todos los días Wookie, te hará olvidar todo, ahora duerme, anda, toma las pastillas blancas.
Esas fueron las veces en las que me hice más daño, dolía en demasía. Casi toda mi ropa estaba cubierta de sangre. Tomarían semanas en cicatrizar, pero serían un recuerdo de lo patético que soy.
Me sequé lo mejor que pude con la toalla pero estaba demasiado empapada de sangre. Agarré mi toalla favorita pues Leeteuk la había tejido (muy mal por cierto) para mí. Era rosada y en el medio recitaba: Wookie, Cookie. La coloqué rápido en la herida y se acabó tiñendo de rojo incluyendo las letras que estaban ahí bordadas.
¿Qué pensaría Teukie-hyung de mí en este momento?- pensé aplastando la toalla contra la sangrante herida.
¿Teukie- hyung? ¡Ese idiota no te ha ayudado para nada! Yo si te ayudo, Wookie. Te ayudaré a superarlo y lo haremos juntos- otra vez esa voz- vamos a dormir.
Escondí la toalla ensangrentada debajo del lavabo, me coloqué la ropa para dormir, tomé unas 5 pastillas para dormir. Últimamente ni la dosis de una me podía hacer dormir, ya casi me había vuelto inmune a eso. No quería estar despierto porque enseguida se venían las imágenes de Hyuk feliz y enamorado de mí.
Creo que fueron demasiadas pues a los 2 minutos, sentí mi cuerpo tambalearse y puedo jurar que vi a Hyuk en mi cama riendo.
-¡Wookie! ¡Te amo!- un rap mal hecho- es mi no-no-vio- Let`s go, buddy xD- decía en mal inglés- you are mine, you bump my heart- más estupideces-. Ya enserio, te amo y quiero estar contigo siempre- y dicho esto me sonrió dulcemente-. No te dejaré nunca, eres mi chibi.
-Hyuk…- extendí la mano pero el recuerdo se desvaneció.
*Luego de horas de sueño inducido*
-¡Wookie! ¡Levanta!- me restregué los ojos y encontré a SungMin empujándome.
-¡¿Qué haces aquí?!- exclamé alarmado y cubriendo mis brazos con la sábana.
-Tenemos Inkigayo hoy. Tonto. – me tocó la nariz y luego se fue.
Suspiré y caí sobre la cama.
-Inkigayo- murmuré levantandomé- pero si ni siquiera me puedo mover bien.
Era obvio ya llevaba una semana sin comer nada más que agua. Es un récord, un tétrico récord.
Me di una rápida vista en el espejo y vi mi cuerpo. El objeto de mis desgracias, aquel cuerpo gordo, que pesaba y apestaba. Me coloqué una camisa negra gruesa y encima un suéter blanco. Trataba de lucir lo menos deplorable posible, maquillaje encima y todos los mejunjes que pueden quitar ojeras y manchas.
Bajé al primer piso para encontrarme con los chicos e ir juntos a la estación de televisión.
-¡RyeoWook!- Heechul me abrazó apretujando mis heridos brazos- Hyuk me dejó usar esta hermosa bufanda roja con brillos que aunque era escandalosa según él me asienta muy bien…es un buen hyung.
-Sí, lo sé- respondí algo aturdido pues me estaba apretando mucho.
Llegamos a la estación, me moría de frío y sentía que mis huesos helaban gracias al aire acondicionado.
*Super Junior en escena*
-Entonces… ¿Eunhyuk y Donghae son los otakus del grupo?- preguntó el animador “cara de pato”.
-Claro, yo y Hae compartimos muchas cosas, y aunque pensándolo bien le regalaré algo muy importante para mí.
Se levantó creando una atmósfera curiosa de lo que iba a hacer, sacó de su bolsillo el collar que me regaló y se arrodilló frente a él, rodeó suavemente el collar en su cuello ante la atenta mirada de todo el mundo incluyendo la mía y la de Hae.
-Es un regalo de mi abuela, solo eso- no, eso significaba mucho más, significaba amor.
-Gracias Eunhyuk- respondió Hae un poco avergonzado mientras me miraba de reojo.
Y así todo el programa siguió con cosas de Jae y Hae.
Viste, no te quiere, pero la Gillette que cargas en el bolsillo te ayudará a superarlo.
Mi mente se nubló tanto, no soportaba tantas imágenes, necesitaba cortarme o acabaría llorando gritándole a Jae que me perdone.
Tenía la peor cara del mundo, pensé que vomitaría en cualquier momento.
-Ahora tenemos a Kim Ryeowook cantándonos su éxito del Inmortal Song “Whistle Blowing”- y el animador “pato” alzó las manos con dramatismo.
Miré a Kangin asustado pues manager-hyung no me dijo que cantaría, le susurró algo al presentador y este informó que cantaría después del corte comercial.
-5 minutos- dijo el director y salí casi corriendo al baño.
Saqué mi Gillette del bolsillo y coloqué seguro a la puerta, estaba llorando mientras me hacía daño pasándome la hoja unas incontables veces en el mismo lugar de la otra vez. Mi ritmo era frenético hasta que decidí que sería suficiente y que trataría de calmarme.
No pude secarme pues un tramoyista golpeaba fuertemente mi puerta para que saliera, estaba asustado que no tuve otro remedio que taparme las heridas sangrantes con el suéter que tejió mi mamá con Teukie-hyung.
-Ya voy- dije mientras destrababa la puerta del baño.
-¡Suerte!- dijeron al unísono mis compañeros, menos Jae que estaba ocupado riendo con Donghae mientras se abrazaban.
Salí a escena cuando la pista empezó a sonar, empecé a cantar aun cuando mis heridas dolían y sentía la sangre recorrer por mis brazos, mi estómago ardía y mi vista era nublosa.
Con cada nota alta sentía mis pulmones quebrarse pero aun así tenía que ser perfecto.
Se hizo eco en el sonido o ¿será un sueño?
Se hizo eco en el sonido o ¿será un amor infinito?
Eso me recordaba tanto a Jae ya que siempre cuando a cantaba lo miraba mientras éste me saludaba, lo miré y deseo no haberlo hecho.
No me estaba mirando, abrazaba a Hae por la espalda y aunque sabía que no estaban juntos me dolía saber que le dio su “corazón” a él.
¿Por qué no me estás mirado? ¿Ah? ¡¿Por qué?! ¡¿Por qué no me estas amando?!
Viste Ryeowook- dijo esa voz dentro de mí- ya no te quiere, ahora solo tendrás que morir solo.
Y mis pies se desplomaron en el suelo igual que yo, el micrófono rodó por el piso hasta llegar al pie de Jae haciendo que me mirara, extendí mi mano a la suya y me miró asombrado, estaba alarmado y mucho que comenzó a llamar a todos los que estaban ahí.
-Si te acuerdas de alguien, cierra tus ojos con fuerza…- repetía dando espasmos en el piso mientras la gente hablaba y a veces gritaban, la sangre se había filtrado por mi camisa tiñéndola de rojo.
-¡Sálvenlo! ¿¡Que esperan!? Salven a mi pequeño- gritaba Jae cogiendo de la camisa a un tramoyista.
-¡Ryeowook!- gritaba Hyuk mientras corriendo se acercaba a mí.
-Jae…Jae…Jae- decía mientras mi cabeza daba vueltas.
Lee HyukJae, te amo más que a mi vida que ya no me importa vivir, me has destruido pero al mismo tiempo me has amado. Gracias.
Hyuk me cogió entre sus brazos mientras me abrazaba fuertemente, había esperado tanto por esto que cerré los ojos sacando las pocas fuerzas que me quedaban para abrazarlo. Frunció el ceño, seguramente le había empapado la camisa blanca que tenía con mi sangre, alzó las mangas de mi suéter y casi entró en pánico al ver las cortaduras que me había hecho.
-¿Qué te has hecho? ¿Ah? ¿Qué hiciste mi Wookie?- dijo mientras me cogía las manos, alcé uno de mis brazos hasta su cara y la acaricié.
-Jae, te amo…- cuando sentí que me moría resbalé mi mano por su cara y cerré mis ojos.
Lo último que escuché fue a Heechul tirando un poco de luces y gritando.
-¡Corten la transmisión hijos de puta! ¡Con eso quieren subir el rating! ¡Con jóvenes que se desmayan! ¡Ustedes le obligaron a hacer esto!
Fin (?)
PD: Siento si alguien siente algun efecto adverso. No tomamos esta enfermedad como un chiste sino como algo real.
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